Buena idea:
Si usted tiene una estación de aire comprimido con un sistema de tratamiento correctamente dimensionado, dará como resultado una tubería sin presencia de agua y sin corrosión. Esto prologará la vida útil de las maquinas, disminuirá las caídas de presión y optimizará costos. Es importante que las tuberías sean de aluminio para lograr resultados óptimos.
Mala idea:
Si no se realiza un estudio previo o se realiza un mal dimensionamiento de los requerimientos para el sistema de tratamiento de aire, la tubería podría verse seríamente afectada. Esta mala decisión podría dañar las maquinas que utilizan aire comprimido y generar corrosión en la tubería. Adicionalmente podría producirse desprendimiento de material por la presencia de agua en la red de distribución de aire e incrementar la caída de presión, provocando otros costos asociados. No es buena idea instalar tubería en acero galvanizado en la red con el tratamiento inadecuado.